Ser abogado fiscalista será fácil para ti.
Al final de este post de mi blog podrás DESCARGARTE mi «Guía para ser abogado fiscalista» en la que te explico cómo puedes lograr conmigo convertirte en abogado fiscalista.
Soy Álvaro Sáez, abogado fiscalista, te defiendo de Hacienda y te enseño a ahorrarte impuestos.
Si el otro día os regalaba mi modelo de reclamación económico-administrativa, hoy vamos a hablar de las #5 claves para ser abogado fiscalista.
Un abogado fiscalista o de impuestos como yo, sobre todo trabaja ahorrándote impuestos y logrando que conserves tu dinero.
Como abogado fiscalista protejo tu dinero y en el camino te regalo la estrategia legal adecuada para ahorrarte más impuestos y ganarle la partida a la inspección de Hacienda.
Porque un abogado fiscalista sobre todo es experto en todo aquello que desemboca o puede desembocar en una liquidación de impuestos.
Se suele creer que, para ser abogado, fiscalista o no, lo único que necesitas tener sí o sí es el grado o licenciatura en Derecho.
Sin duda, es un requisito y sin duda también, es aquel que te habilita para poder llegar a ser abogado. Pero, con eso no basta.
¿Qué vas a encontrar en este post?
⭐Abogado fiscalista: saber de Derecho es como el valor al soldado, se le presupone.
Vamos a hablar de «hard skills» y «soft skills» y de la importancia de cada una según el contexto.
Te explico. Las «hard skills» son las «habilidades duras» y las «soft skills» las «habilidades blandas». De las primeras podemos decir que son aquellas habilidades concretas que permiten llevar a cabo una determinada tarea o trabajo.
En este caso las «hard skills» para ser abogado fiscalista serían la licenciatura o grado en Derecho, el máster de la abogacía, la especialidad en economía y contabilidad, y el hablar inglés.
Pero, tener lo anterior —pese a su importancia— no significa que seas capaz de poder encontrar una solución al caso concreto en el océano de normas y jurisprudencia.
O que sepas llegar a un acuerdo y hacer las paces con Hacienda con éxito, o que sepas convencer al Tribunal de que tu cliente lleva la razón.
O que sepas tomar la mejor decisión para tu cliente y que mientras dure el procedimiento tu cliente confíe en ti a la espera de la resolución.
Por el contrario, las «soft skills» tienen más que ver con esas actitudes y capacidades para enfrentarse al día a día, con las habilidades personales y sociales.
Va de las destrezas que hablan de nosotros, de nuestra forma de ser, de nuestra manera de relacionarnos. Son como la columna vertebral en la que debemos apoyarnos.
Sea cual sea tu campo profesional, vas a tener que confiar en ellas si quieres aportar un valor añadido, si quieres diferenciarte o si quieres crecer, en este caso, como abogado fiscalista o directamente, igual que yo, ser abogado fiscalista.
➡️ Las 5 claves para ser abogado fiscalista a continuación:
- Resilencia
Resilencia es una palabra muy utilizada en los últimos meses —tiene todas las papeletas de convertirse en uno de los términos estrella del 2020—.
Esto es debido principalmente a la pandemia que nos ha obligado a entenderla y a encontrar en ella esa capacidad de adaptarnos a los cambios y a un entorno inesperado e incierto.
Y, resilencia es una de esas «soft skills» o habilidad clave para ser un buen abogado fiscalista.
La adaptabilidad y la capacidad de recuperación en un contexto volátil, complejo y nuevo en un sector como el legal —que es muy variable— se vuelve un requisito imprescindible.
Poder adaptarse o recuperarse lo antes posible de un gran cambio o una situación difícil y salir fortalecido de ella es un superpoder que los abogados fiscalistas pueden desarrollar y deben poseer.
Aumentando su resiliencia, los abogados pueden optimizar su desempeño, mejorar la experiencia con el cliente y aumentar su propio bienestar.
- Creatividad
Se trata de una «soft skill» muy valorada en el sector de la abogacía, donde se aprecia que la persona aporte ideas y encuentre soluciones donde otros no son capaces de verlas de forma innovadora.
Se necesitan abogados fiscalistas que ejecuten sus funciones y también que sean capaces de dar estrategias que ayuden a sus clientes a ahorrarse impuestos.
Y también se necesitan abogados fiscalistas que puedan defender al cliente de la inspección de Hacienda con creatividad para resolver conflictos o aportar luz en momentos en los que hay que tomar decisiones.
- Inteligencia emocional
La inteligencia emocional es aquella que nos permite poder controlar y expresar las emociones, así como gestionar las relaciones con los demás de forma empática.
✅La clave para que un abogado fiscalista gane o pierda en un contexto judicial: la inteligencia emocional.
Poder gestionar momentos de estrés en los que no perdamos el norte, situaciones en las que hay que tomar una decisión y ser consecuente, es imprescindible para casi cualquier abogado, para uno fiscalista también.
- Pensamiento crítico
Un buen abogado fiscalista debe dudar de lo que se le plantea constantemente. No debe conformarse.
Debe cuestionarse lo que ve, analizarlo y sobre todo comprenderlo.
Es importante tener un pensamiento crítico para poder evaluar con mayor certeza y así tener en cuenta todos los factores que influyen a nivel económico y fiscal en un caso o cliente.
Alguien así siempre tendrá una visión más global.
Y una persona así será capaz de asimilar de manera mucho más ágil y eficiente cualquier situación que se le plantee.
Ya sea un requerimiento de la Agencia Tributaria o una inspección de Hacienda.
- Habilidades comunicativas
Esta es una habilidad de esas que de buenas a primeras se le presupone a cualquier abogado.
Se da por hecho que un abogado, sea del tipo que sea, sabrá expresarse de forma correcta y hacer entender su mensaje a su interlocutor.
El abogado fiscalista debe utilizar la jerga adecuada, pero las habilidades comunicativas van más allá sobre todo a la hora de tratar con el cliente.
El lenguaje debe hacer sentir cómodo al cliente y también permitirle comprender su situación. Las habilidades correctas en la comunicación tienen mucho que ver con la empatía.
Una vez planteadas todas las «habilidades blandas» necesarias para ser un buen abogado fiscalista ya solo me queda insistir en la importancia de las mismas.
Descárgate mi «Guía para ser abogado fiscalista».
Se trata de un informe valorado en 377 euros, que te regalo de forma gratuita, 377 euros.
Y tú dirás:
— Muy bien, Álvaro, me has explicado las «skills» para ser abogado fiscalista, yo ya tengo o estoy haciendo el Máster de la abogacía, pero ¿dónde aprendo a ser abogado fiscalista?
La pregunta no es dónde, sino con quién. Y la respuesta es conmigo.
Me encanta ser abogado fiscalista y quiero que tú también puedas serlo. Mentorizo a jóvenes abogados y no tan jóvenes para ser abogados fiscalistas.
Te he explicado qué necesitas tener para ser abogado fiscalista, pero no te he dicho cómo.
En la guía que he elaborado para ti y que puedes descargar aquí debajo te explico las claves sobre cómo puedes llegar a ser abogado fiscalista:
Guía para ser abogado fiscalista
Soy abogado fiscalista desde 2008, tengo mi propio despacho SAEZ.LAW y ahora quiero que tú también seas abogado fiscalista.
Álvaro Sáez.
Abogado fiscalista.
Muchas gracias por el post, la verdad que es muy completo y está muy bien explicado para saber como formarnos y convertirnos en abogados fiscalistas.
Muchas gracias por tus palabras.