Existen ideas de negocio brillantes, también existen ideas de negocio conmovedoras. La de hoy es una mezcla de ambas que tras muchas vueltas consiguió alcanzar el éxito buscado.
Normalmente estas historias siempre comienzan con un duro golpe y esta no va a ser menos.
Los hermanos Keith, los 13 (¡!), vivían con sus padres en plenos años 90. No tenían base oficial ya que se pasaban el tiempo en un enorme autobús en la carretera. De aquí para allá buscándose la vida. No era una vida estable pero no era una mala vida.
Cuando el mayor de los 13 contaba tan solo con 20 años el Sr. Keith enfermó de cáncer.
Las facturas médicas pronto comenzaron a acumularse y en el transcurso de apenas dos años la cuenta familiar menguó hasta llegar a cero.
Los cuatro hermanos mayores decidieron tomar las riendas de la situación y con edades que oscilaban entre los 22 y los 17 pusieron en marcha la idea de negocio que su padre llevaba gestando toda su vida.
Las barras energéticas de miel y cacahuete Perfect Bar.
Vendieron lo único de valor que poseían un Bed and Breakfast por 100.000 $ de los cuales invirtieron 65.000$ en comprar una máquina de envasado y el resto se gastó en materia prima.
Solo tenían una oportunidad y tenían que aprovecharla.
La inversión resultó rentable.
La receta familiar terminó por dar sus frutos y pasado un tiempo un distribuidor de grandes superficies se fijó en su producto.
Durante 10 años y con el negocio en manos de los hermanos fueron sorteando escollos y ganándose la vida.
Hasta aquí nada destacable más allá la capacidad de emprendimiento de unos adolescentes.
El sueño se había cumplido pero las expectativas de éxito no tanto.
Y aquí nuevamente la familia Keith volvió a dar en el clavo.

✍Un asesor financiero fue la clave. Con pensamiento estratégico y buen juicio fue vital para que la empresa prosperase.
Buscaron asesoramiento económico especializado y consiguieron inversión.
Una idea de negocio que tardó 10 años en salir delante de pronto despegó como un cohete. Perfect Bar se convirtió en una empresa de 300 millones que hoy por hoy llega a 27.000 tiendas de EEUU incluyendo gigantes como Target o Walmart.
En 2015 los hermanos se dieron cuenta que las ganas y el empeño habían llegado hasta su máximo posible, y que un buen asesor fiscal era necesario para poder seguir escalando su negocio.
Y, ¿qué creéis que obtuvieron en esa asesoría?
¿Cuál fue el truco que los llevó a la cima?
¿Estancamiento o inversión? ¿No pagar Impuestos o pagarlos?
Sin ningún género de duda la inversión que esta empresa de comida saludable consiguió por valor de miles de dólares fue la llama que prendió la mecha del crecimiento.
El saber decidir a tiempo que quedarse quieto, cuando hablamos de beneficios, no suele ser una buena idea de negocio.
El tener el coraje de pedir ayuda y dejarse aconsejar financieramente.
Pero a esa llama cabe añadirle la inteligencia de hacer lo posible para legalmente no pagar Impuestos. ¿Cómo? Invirtiendo su parte. Siendo activos con sus ganancias y poniéndolas en el juego del crecimiento de su propio negocio.
El asesoramiento económico no solo les proporcionó el mejor inversor posible o un cambio en la producción para abaratar costes.
Les trajo también lo que uno de los hermanos llamó «Smart money».
Con estrategias para pagar menos Impuestos por el dinero que ganaban. Poniendo a trabajar el dinero para ellos con una baja fiscalidad basada en reinvertir constantemente sus beneficios.

⭐La venta de Perfect Bar ha llevado a los Keith a nuevas ideas de negocio.
Hace unos pocos meses la receta de la barra de proteínas que un día inventó Bud Keith a base de mantequilla de cacahuete y toda la empresa que venía con ella fue vendida a Mondelez.
—Mondelez es un conglomerado multinacional estadounidense dedicado a las industrias de la confitería, alimentación y bebidas, que emplea a unas 100.000 personas en todo el mundo—
La venta no debió ser barata.
Los hermanos Keith se quedaron con el dinero y una pequeña parte de la compañía y siguen operando con diversos cargos en la empresa desde su base en San Diego.
¿Y, qué hicieron con todo lo que ganaron?
Pues parece ser que seguir emprendiendo e invirtiendo en ideas de negocio acordes a los valores saludables que ya representaban las Perfect Bar y ahorrándose con ello el pago de altos Impuestos.
Actualmente trabajan en proyectos asociados al crecimiento y la protección de la comunidad y el entorno en el que viven. Dentro de la propia empresa han lanzado unos nuevos snaks en la línea de las barritas enfocados a los más pequeños como merienda para la escuela.
Y suma y sigue.
La familia Keith invirtió en algo que conocían muy de cerca, en lo que creían y que les apasionaba. El valor de lo que hacían era siempre y hasta cierto punto mayor que el coste. De ahí que estuvieran dispuestos a reinvertir todo su dinero.
Para ellos, la mejor estrategia de inversión fue aquella con la que más dinero ganaron y actualmente menos Impuestos paga, porque invirtieron en algo en lo que tenían fe absoluta, algo que les entusiasmaba y era un sueño.
El éxito y la intención fueron de la mano en su proyecto nacido de la inocencia y del tesón.

❤️ Iniciar un negocio es como entrar a una montaña rusa de emociones, solo tienes que hacer hincapié en la emoción adecuada.
Emprender y saber en qué invertir no es tarea fácil ni sencilla. La clave está en el asesoramiento adecuado que te guíe hacia la rentabilidad y, por supuesto en el corazón y las ganas que le pongas.
Piensa en nuestra querida familia Keith.
Todo lo que realmente tenían era la receta de su padre. Y aquellos que conocían en el negocio de la alimentación les dijeron que su idea de negocio estaba condenada al fracaso…
El resultado: Una próspera empresa familiar que honró la memoria de su progenitor.
Álvaro Sáez
Abogado Fiscal